
Vivir es confiar a pesar de todo;
es esperar a pesar de todo;
es sonreír a pesar de todo;
pero…
también es admirarse, porque merece la pena;
también es ilusionarse, porque merece la pena;
también es soñar, porque merece la pena;
y es abrazarlo todo,
porque…
¿cómo podríamos vivir sin abrazar?
(Jordi Llimona)
Imaginas una vida sin contacto físico, sin poder reclinar tu cabeza sobre el hombro de alguien querido, sin sentir su calor, su energía…
Abraza desde el alma, con el alma, sintiendo que en esa fusión tu energía crece, se expande, forma parte del cosmos y regresa a la tierra en forma de energía que pasa a través de la persona abrazada, la alimenta y la llena de vitalidad.

