Compasión

Este año hemos trabajado en los talleres el perdón, la gratitud y la compasión, y en esta última vimos como tener compasión es inherente al ser humano siempre que este tenga la suficiente empatía como para saber ponerse en el sufrimiento de las demás personas y entender que tal y como ellas desean verse libres de sufrimiento yo también, que tal y como ellas desean ser felices yo lo deseo también y que tal y como ellas desean vivir en paz yo también lo deseo. Pudimos experimentar la compasión por otras personas, queridas, conocidas y desconocidas para entender que en el fondo todas somos iguales y buscamos las mismas cosas.
Y dentro del taller una de las partes que más trabajamos es la compasión por nosotras mismas o autocompasión y me parece razonable pararme aquí para reflexionar el concepto, que a veces se confunde con autoindulgencia, pena o lástima y no tiene nada que ver con ello.
Dice Joan Didion en El año del pensamiento mágico: «la autocompasión es sentir lástima de ti misma, la autocompasión es chuparse el pulgar, la autocompasión es bua-bua, pobrecita de mí, la autocompasión es el estado que se permiten quienes tienen lástima de sí mismas y en el que incluso se regodean.»
Y si leemos bien la definición vemos que aparecen la lástima y la pena y ninguna de ellas es compasión.
Tener pena es lamentarse de algo que nos entristece, algo que ha salido mal. Tener lástima nos coloca en una posición de superioridad, es pensar que nunca nos vamos a ver en ello, pero tener compasión es muy diferente.
En los talleres es una de las mejores herramientas que puedo compartir con ellas. La mirada compasiva es poder vernos en nuestra vida con amor, pensando que hicimos lo que pudimos con las herramientas de las que disponíamos, sin machacarnos.
Mirando al pasado desde esa posición nuestro juicio por lo que ocurrió y el cómo actuamos se suaviza, podemos entendernos, abrazarnos y perdonarnos.
Me encanta trabajar con esta perspectiva y por eso me formé en Cultivo de la Compasión con Nirakara Institute:

La compasión hacia una misma consiste en tratarse como a una buena amiga: ofrecerse amabilidad y comprensión en momentos difíciles en vez de criticarse o aislarse. Al desarrollar la autocompasión surgen, más a menudo, preguntas cómo: ¿Qué necesito? ¿Cómo estoy?

Su visión es la que yo creo que funciona y prevalece en una sociedad cada vez más individualista y egoísta.

¿Cómo te relacionas contigo misma? ¿Utilizas la mirada compasiva o la culpabilizadora?