¡Ay, mi madre!

Dos libros estupendos que tenemos recomendados en nuestra bibliografía de MaternARTE

El primero El Baile de Irène Némirovsky es corto y deja ganas de más. En él se ve la relación que tiene una madre con su hija afectada por un inminente cambio de estatus social. La hija pasa a un segundo plano y no está muy a gusto allí. ¿Qué hacen las niñas para llamar la atención, para ser vistas? Esta hace algo que va a cambiar el curso de su propia vida, pero no lo sabe.

Ha muerto mamá de Vigdis Hjorth es un libro intenso y desgarrador en el que una hija trata de volver a la relación con su madre y no es bien aceptada.
Ambos con similitudes en cuanto a la forma de maternar y lo que las hijas sienten y también en cuanto a los papeles de las madres y su clasismo.

Entender a madres e hijas en un ejercicio de abstracción, sin entrar en sus emociones es difícil. Lo mejor es dejarse arrollar por ellas y sentir la fuerza de sus pasiones.


Una madre nunca puede ser una persona normal y corriente para sus hijos

La madre es el espejo en el que la hija ve su futuro y la hija es el espejo en el que la madre ve su yo perdido


Es más fácil inventarse a una buena madre muerta que a una viva y sin embargo, tanto a la madre muerta, como la viva, las inventamos en el fondo buenas


Son pura belleza!

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