
Hay lecturas que además de recomendables, son necesarias. Acabé ayer el nuevo libro ilustrado de Paco Roca con historia de Rodrigo Terrasa y aún tengo el cuerpo que no es mío.
Además de incluirlo en la bibliografía de Crisis y duelos para trabajar los duelos sociales, lo estoy trabajando también para el próximo taller de fotogenograma y cómo no, dentro del apartado de memoria histórica en las constelaciones jurídico-sociales.
La historia es desgarradora y esperanzadora a la vez. Por una parte sientes gratitud por todas aquellas personas que se tomaron la molestia de hacer algo bueno dentro del horror y por otra la tristeza de unos gobiernos que siguen ignorando a tantas personas enterradas de mala manera.
No se puede cerrar un duelo social si la mayoría de esas personas no han tenido un entierro digno, si sus familiares no han podido hacer un rito de despedida, si no hay un perdón sincero…y así seguimos.
A nivel sistémico es importante saber qué pasó y quiénes estuvieron involucrados, porque de una forma u otra quedan ligados a nuestro sistema y de esa forma hay cargas que no soltamos por no saber soltarlas.
Creo que he llorado desde la primera página a la última, porque es realmente emocionante y brillante.
Gracias a los dos por esta maravilla.
