Si resiste, existe

Cuántas veces nos encontramos creyendo que hemos solucionado algo y de repente ese algo vuelve a aparecer?
En terapia es habitual que tras un trabajo pensemos que el proceso ya está terminado, que ya hemos sanado la herida. Pasado un tiempo esta herida vuelve a supurar y probablemente es porque ese proceso, que creíamos cerrado, sigue abierto.

Si resiste, existe.
Todo proceso terapéutico requiere de paciencia, escucha interior, compromiso, mirada compasiva…mientras siga apareciendo un trocito de herida en algún momento, es que aún tenemos que seguir trabajando en ello.
También podemos tener esa sensación cuando, tras cerrar un proceso, nos encontramos en una situación igual o parecida a la que acabamos de cerrar y nuestro cuerpo, nuestra memoria corporal para ser exactas, recuerda las mismas sensaciones de aquella primera vez y esto nos hace un clic en el presente y por eso la herida parece que vuelve a abrirse, pero no, en esta ocasión quizá solo pique pero no supure. Eso es que el proceso va por buen camino.
Depende de los recursos aprendidos y de las propias herramientas que esa herida siga curando bien y que, cuando por algún motivo vuelva a dolernos, sepamos cómo atajarlo a tiempo .

Deja un comentario

search previous next tag category expand menu location phone mail time cart zoom edit close