A qué jugamos?

Esta fue la pregunta que sonó en mi cabeza el otro día, y que me sirve de reflexión para traer algo que me preocupa.

Estamos en tiempo de vacaciones y muchas aprovechamos para echar una partida de Sudoku, de Apalabrados, de cualquier juego que nos entretenga un rato y nos haga pasar mejor el calor, y aquí viene lo bueno.

En ciertos juegos tienes que soportar publicidad para poder acceder de forma gratuita a ellos y eso hace que te metan por medio mucha publicidad de otros . Hasta aquí todo bien, pero, qué es eso de proponernos un juego en el que una mujer es echada de su casa, tras recibir una bofetada y acaba en la calle con su hija, muerta de frío, siendo rechazada, humillada, maltratada y que termina en una casa destrozada en la que se van muriendo poco a poco, si no eres capaz de salvarlas construyendo todo lo que le falta?

Acaso no tenemos bastante con vivir en una sociedad, en este caso la española, en la que llevamos 48 víctimas de violencia de género este año?.

De verdad creemos conveniente tener que jugar a este tipo de juegos?

Quién diseña estos juegos y qué busca con ellos?

Cómo te sientes cuando te proponen algo así?

En mi caso, fue asombro que fue evolucionando en ira, perplejidad, incomodidad, impotencia.

Hacernos jugar en el rol de salvadoras solo perpetúa los estereotipos. Este tipo de juegos no enseñan nada, solo nos sitúan en el lugar en el que quieren atraparnos, el de los cuidados.

Y los cuidados están bien. Están bien cuando los damos a quienes queremos, cuando empatizamos con quienes lo están pasando mal, cuando nos los damos a nosotras mismas, pero, no tienen ningún sentido si juegan con sentimientos y emociones.

Con todo lo que está pasando en el mundo real no nos hacen falta más cosas horribles solo para llegar a la frustración de no poder hacer nada.

Si realmente queremos adoptar el papel de salvadoras, podemos hacerlo de otras maneras, activamente, con acciones que realmente reviertan en personas reales y no a través de un juego. Eso es perverso.

El juego en cuestión añade, además el extra de encontrar bebés y cachorros en contenedores a los que por supuesto también tienes que salvar.

Además de esta joya, me han publicitado otro tipo de juegos que van dirigidos expresamente a niñas, llenos de mandatos de género para que estén bien aleccionadas desde pequeñitas.

No sé de qué forma se puede denunciar este tipo de juegos, lo que sí sé, es que deberían estar prohibidos, porque lo único que fomentan es el sufrimiento, acostumbrarnos al sufrimiento, acostumbrarnos, a ver gente pasar hambre, acostumbrarnos a ver gente maltratada, asesinada y a que no pase nada, y para eso ya tenemos el telediario.

Qué tal concienciarnos y denunciar ese tipo de propuestas?

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