¿Cómo vives tu vida?
¿Con miedo o con confianza?
¿Con rigidez o con fluidez?
¿Con certezas o con incertidumbres?
Cada cual vive su vida como elige vivirla y de ese punto de vista depende si la vivirá felizmente o transitando en las sombras de la amargura. Una vida plena es elegirte a ti mism@ como compañer@ de viaje, disfrutar ese camino e integrar las vivencias que lo enriquecen. Florecer con cada amanecer y agradecer cada atardecer. Adaptarse a cada circunstancia haciendo que lo difícil parezca fácil. No perdiendo la esencia de lo que somos, no perdiendo de vista el Norte que nos hemos marcado. Sólo así viviremos conscientemente la vida que queremos vivir.